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El Viejo, Nicaragua

LO QUE NOS HACE SENTIR
COMO PUEBLO

Quiero compartirles la experiencia tan profunda que he tenido el regalo de vivir del 27 de septiembre al 1 octubre.

Quienes han pasado por Mixtepec, en Oaxaca, Mx., saben la gran importancia que tienen las Mayordomas en ese querido pueblo, en cuanto a vivencia de fe, de compartir solidario e identidad de pueblo.

En este ao, le toc a Doa Mara Marroqun, suegra de Karmele mi sobrina, la Mayordoma de San Miguel, que es una de las grandes Mayordomas. Como su esposo ya tiene otra familia en EE.UU. y se hizo evanglico, no pudo participar y le toc a Fausto, esposo de Karmele, como hijo mayor de la mayordoma, asumir el cargo y la responsabilidad, junto con su madre y su esposa.

Karmele envi una carta invitando a todas las MMB que quisieran participar, cuando me lleg la invitacin dud mucho, pero por fin, despus de sentir el apoyo de la comunidad de El Viejo en Nicaragua y de la Comisin Regional, me decid a aceptar la invitacin y me fui.

Fue una experiencia increble. Haba vivido muchas mayordomas en los 9 aos que estuve en la Misin de Mixtepec, pero ahora tuvo mayor riqueza, porque la viv desde dentro y como parte de la mayordoma en todos los trabajos, acogida a la gente que llegaba, rituales, procesiones, etc. Llegu la vspera de la fiesta y me pude participar en toda la preparacin, como 50 mujeres que iban y venan ayudando desinteresadamente, y la familia atendiendo y sirviendo a quien llegaba, eso durante todo el da. Para que comprendan la magnitud de la fiesta, mataron 2 toros, 100 guajolotes, 30 gallinas y 1 cerdo. El mole tena 12 especias diferentes: almendras, nueces, chocolate, canela, etc y para completar, 65 kg. de diferentes chiles, todo ello, tostado y molido. No pretendo dar recetas, pero es para que se hagan un poco la idea de lo que supuso cocinar todo eso y servirlo, por tres das a alrededor de 350 personas y familias, porque a cada invitada/o se le daba un jarrito para compartir la comida con su familia.

Generosidad, solidaridad, compartir, acompaar, alegra todas y todos buscando como ayudar, como colaborar y todo esto lleno de oraciones, incienso y rituales indgenas en un cuarto de la casa donde estaba el santito, San Miguel.

Lleg gente desde los EE.UU. para la fiesta y decan esto es lo nuestro, lo que nos hace sentir como pueblo y se les vea tan felices

Yo pensaba que la gente no me iba a conocer despus de tantos aos, pero el viernes que llegu, era da de mercado, mi sorpresa fue cmo la gente llegaba a saludarme con mucha alegra diciendo madrilu que significa madrecita en mixteco. Lo que ms me lleg es que no era solamente mi persona, sino el sentimiento y la alegra que tenan porque las madres se seguan acordando de su pueblo. Expresiones como cuando ustedes se fueron, el pueblo se qued triste, no tenemos quien nos acompae. Por supuesto la pregunta de por qu nos fuimos, por qu no se queda se repeta continuamente. Se imaginan cmo llegaban hasta dentro

Me preguntaron por todas y cada una de las que tuvimos la dicha de pasar por aquel pueblo. Desde Guiomar hasta las ltimas: Miren y Gloria Alicia, hermanas MMB.

Pasada la fiesta, los dos ltimos das, me dediqu a visitar a la gente en sus casas: Imelda, Tomasita, Don Tereso, Doa Amparo, Sara, Doa Paula la viuda de mi compadre Otilio goc muchsimo con ellas y ellos, y por qu no decirlo, tambin lloramos juntas y juntos. Tambin sent muy bonito que me iban brotando palabras y frases en mixteco, segn iban pasando los das y la ilusin que le haca a la gente escucharme hablar en su lengua.

Me queda un sentimiento de gozo y alegra por el reencuentro, de agradecimiento por la fe de este pueblo, por tantos valores cristianos que viven normalmente, como parte de su cultura, de su identidad y tambin gran felicidad porque las MMB seguimos en el corazn de ese pueblo, junto a eso la tristeza de haberlo tenido que dejar.

Gracias a ese pueblo, por ser como es, gracias al Instituto y a la Regin de Mercedarias Misioneras de Brriz que me dieron la oportunidad de vivir ah tantos aos, gracias a mi comunidad de El Viejo que me anim y apoy para que pudiera vivir esta experiencia que me ha dado tanta vida y gracias a Karmele que meti en mi familia a un mixteco y a su pueblo, y que me invit a participar en esta hermosa e inolvidable fiesta de la Mayordoma.

Abdona Viar, MMB