NOTICIAS

Casa de Formación, Guatemala

“SALGAMOS APRISA AL ENCUENTRO CON LA VIDA”

img-colegio_01

“Encuentro nacional de religiosas y
religiosos de Guatemala 2017”

El Encuentro se llevó a cabo del 27 al 29 de enero en la ciudad de Guatemala. El día 27 por la tarde se tuvo una reunión con las distintas Comisiones de Trabajo de CONFREGUA. Se presentó el Plan Global y el POA 2017.

Se trabajó en cuatro grupos formados por las Áreas de Misión: Pastoral Educativa (niñas/os y jóvenes, en claves de prevención y protección), Pastoral de la Salud, Pastoral con ancianas/os y Pastoral Parroquial en general (urbana y marginal), con una única pregunta: Qué temáticas nos ayudarían a mejorar nuestro trabajo, con el fin de organizar las cuatro Jornadas de Reflexión a lo largo del año 2017.

Después se trabajó por Regiones con el fin de presentar a la asamblea cada Región Pastoral en clave de JPIC y programar los Encuentros.

Los dos días siguientes del Encuentro en clave de formación, se iniciaron con el análisis de realidad, el cual fue abordado por dos panelistas: el Lic. Jorge Santos de DDHH y Rosalina Tuyuc, mujer grandemente comprometida con las luchas más significativas de los últimos años en el país, entre sus grandes compromisos ha sido diputada y de las fundadoras de CONAVIGUA.

El tema “Reconfiguración y resignificación de la Vida Consagrada a la luz de la Visitación”, fue animado por la Hna. Cristina Rovaina, RSTJ, de nacionalidad uruguaya. El tema está enmarcado en el horizonte inspirador del Plan Global de la CLAR y el Plan Global de CONFREGUA, representados con el ícono de la Visitación de María a su prima Isabel (Lc. 1, 39-45).

El ícono de la Visitación, sugiere una “salida” urgente al encuentro con la vida, en el marco de la realidad (clave de lectura) donde la vida clama y en donde el sufrimiento, la violencia, la corrupción y muerte están presentes cada día aquejando nuestras realidades. Estos signos que nos agreden, provocan y convocan, nos invitan a ir más allá, nos interpelan a ser presencia profética que ilumine y alimente, para descubrir allí el Misterio escondido: Jesús, el cumplimiento de la Promesa.

La “reconfiguración” de las estructuras, liderazgos, formación, etc. de la Vida Consagrada, tiene que ver con el horizonte de sentido, saber hacia dónde vamos, puesto que en cada tiempo hay una forma, unos ritmos y manifestaciones distintas para llegar a ser una Vida Consagrada significativa. Es volver a las raíces evangélicas y carismáticas desde la oración y el encuentro con Jesús en un proceso continuo de identificación con él, “desconfigurando” procesos degenerativos (corruptelas, adulterios, etc.), es decir, a una continua “resignificación” (conversión), y desde una fidelidad creativa preguntarnos: qué harían aquí y ahora nuestras/os fundadoras/es, para dar mejores respuestas con flexibilidad a las urgencias de la realidad hoy.

En el “cómo” realizamos la misión, está nuestro “profetismo”. El profetismo vivido desde la Mística, la Comunidad-comunión (las relaciones interpersonales evangélicas) y los compromisos apostólicos.

El ícono de la Visitación, nos abre a una nueva perspectiva del encuentro y al necesario complemento generacional. María e Isabel juntas, en un nosotras/os.
El ícono nos sugiere e invita a una Vida Consagrada que dé una palabra ante las realidades del mundo actual y se comprometa desde unas opciones de vida significativas:

•En comunidades místicas y proféticas.
•Volver a las fuentes en fidelidad creativa: Evangelio y Carismas.
•En comunidades que humanizan sus vínculos y estructuras.
•En salida misionera hacia las periferias humanas y existenciales.
•En comunión con la Iglesia.
•En misión compartida con laicas/os.
•Intercongregacionalmente.

La metodología del Encuentro fue muy ágil y participativa. Se nos iba invitando en cada bloque de trabajo a reflexionar algunas preguntas a nivel individual y luego a compartirlas en grupos intercongregacionales. La experiencia fue muy rica, ya que pudimos reflejar algunos puntos comunes que nos atañen a todas/os y a la vez poner el énfasis en distintos matices por las realidades geográficas, generacionales y carismáticas de quienes participamos.

Salimos con el corazón agradecido y con deseos de profundizar y ponernos en camino de conversión y en apertura a los cambios que la realidad nos sugiera.

Comunidad MMB de Cotió